Se ha encontrado una hembra de la especie de tortuga Chelonoidis phantasticus en las Islas Galápagos. Esta especie se creía extinguida desde hace un siglo.
Una tortuga gigante que se creía extinguida ha sido encontrada viva en la isla Fernandina, en las Galápagos. El descubrimiento ya había tenido lugar en 2019, pero ahora la investigación de ADN confirma que por primera vez en más de un siglo la tortuga (Chelonoidis phantasticus) ha sido realmente encontrada.
Los biólogos encontraron a la tortuga, a la que dieron el nombre de Fernanda, en la isla más occidental del archipiélago. Es la segunda tortuga descubierta en la isla. El primero fue un macho en 1906.
Es posible que Fernanda haya sido transportada a la isla por los humanos, o que haya sido arrastrada por una tormenta. Dado que en las islas cercanas también se encuentran otras especies de tortugas gigantes, los investigadores no estaban seguros de a qué especie pertenecía. No tiene un caparazón en forma de silla de montar, que sí tenía el antiguo ejemplar macho.
Análisis de ADN
Para determinar la especie de la tortuga, el biólogo evolutivo Stephen Gaughran, de la Universidad de Princeton, y sus colegas compararon su ADN con el de otras tortugas de las Islas Galápagos. Utilizando una muestra de sangre de Fernanda y una muestra ósea del espécimen macho que ahora se encuentra en un museo, el equipo confirmó que sus genes coincidían bien y se diferenciaban de las otras 13 especies de tortugas gigantes.
Pudimos mostrar la conexión entre Fernanda y la otra tortuga fernandina, y al mismo tiempo distinguir entre estas dos tortugas y las especies que vemos en otras islas", dice Gaughran. 'Me sorprendió, y una vez que llegó, me entusiasmó mucho'.
Buscando compañía
Los investigadores habían encontrado anteriormente excrementos de tortuga en la isla, lo que llevó a algunos a creer que la especie aún existía. La isla volcánica está deshabitada y es de difícil acceso, por lo que la búsqueda de tortugas supervivientes es un reto. Gaughran es optimista y cree que hay otros supervivientes encubiertos en Fernandina.
Nuestra esperanza es que todavía haya algunas de estas tortugas vagando por la isla. Pero probablemente no haya muchos", dice Gaughran. Si los científicos consiguen encontrar un macho de su especie, las tortugas fernandinas podrían luchar por salir del borde de la extinción.
Se calcula que Fernanda tiene más de 50 años, pero puede vivir hasta 200 años. Así que los investigadores aún tienen tiempo de encontrarle una pareja adecuada. Hasta entonces, vive bajo la protección de los expertos del Centro de Tortugas de Galápagos.