La vida salvaje también se comercia en la dark web (pero por motivos muy distintos a los que crees)

El sorprendente comercio de plantas y animales salvajes en la dark web: Descubriendo un mercado clandestino de drogas y alucinógenos que amenaza la biodiversidad

No solo en internet “normal”, sino también en la dark web, se comercia con plantas y animales salvajes. Y lo sorprendente de esto es que, en la mayor parte de los casos, no se venden como mascotas, objetos decorativos o por sus propiedades medicinales, sino como… drogas.

En gran medida, el comercio de organismos silvestres se ve facilitado hoy en día por internet. Los estudios ya han demostrado que el comercio de fauna y flora silvestres es abundante a través de la “web abierta” (como los mercados en línea), pero también a través de la “web profunda o deep web” (como las redes sociales y los servicios de comunicación como WhatsApp). Pero ¿qué ocurre con la dark web (véase más abajo, en el recuadro)?.

Sin embargo, un nuevo estudio cambia esta situación y demuestra que en la dark web también se comercia con una amplia gama de organismos salvajes, y que la mayor parte de la mercancía se ofrece y vende por sus propiedades para alterar la mente. Este artículo puede leerse en la revista people & nature.

La Dark web

La dark web o web oscura es un “rincón oscuro” de internet que se diferencia de las demás partes de la red en varios aspectos. En primer lugar, se necesita un software especial para acceder a la web oscura. Además, no hay motores de búsqueda para la dark web; por tanto, quien quiera visitar un sitio web en ella debe conocer su dirección de antemano. “El objetivo de la ‘dark web’ es proporcionar anonimato a los usuarios”, escriben los investigadores. “Aunque varias operaciones llevadas a cabo con éxito por las fuerzas del orden sugieren que el anonimato no puede garantizarse”.

Nueva investigación

Debido a que la dark web es de difícil acceso y búsqueda, hasta hace poco los investigadores tampoco tenían una buena imagen del comercio de fauna y flora silvestres en la web oscura. Estudios anteriores al respecto no llegaron más allá del descubrimiento de un puñado de mercados que ofrecían cactus, bolsos de piel de reptil, marfil y cuernos de rinoceronte. Una buena razón para echar otro vistazo a esa dark web de todos modos, decidieron recientemente los investigadores. “Nuestro objetivo era estudiar exhaustivamente el comercio de fauna y flora silvestres en la dark web”, escriben en su estudio. Y lo han conseguido: en su estudio aportan pruebas de que, entre 2014 y 2020, 153 tipos diferentes de animales, plantas y hongos fueron objeto de comercio en la web oscura en 51 mercados diferentes. Y, sorprendentemente, la mayor parte de los organismos se comercializaban por sus propiedades para alterar la mente, o como… drogas.

Algo sorprendente

Los hallazgos tomaron por sorpresa al investigador phillip cassey, según explica. “No sabíamos cuántos organismos salvajes encontraríamos en la dark web, pero esperábamos ver más comercio de animales salvajes tradicionalmente populares o de productos derivados. Por ejemplo: marfil, escamas de pangolín, cuernos de rinoceronte, grandes felinos, mascotas exóticas vivas, cactus, orquídeas, etcétera. Pero en lugar de eso, nos encontramos con un comercio muy diverso de hasta 153 especies diferentes, la mayoría de las cuales se vendían por sus propiedades para alterar la mente”. 

La mayoría de estas especies pueden considerarse plantas, pero también había hongos y animales que cambiaban de manos en la dark web por sus propiedades alucinógenas.

Una de las especies que los investigadores encontraron con más frecuencia en la dark web fue, por ejemplo, la mimosa tenuiflora. La corteza de este árbol sudamericano contiene un alucinógeno muy potente: la DMT. Pero también se traficaba con animales por el efecto alterador de la mente que pueden tener en nosotros, los humanos. “El ejemplo más famoso es el sapo de Colorado”, explica Cassey. La piel de este sapo segrega una toxina que tiene compuestos psicoactivos.

Las especies desaparecidas

Aunque, por supuesto, es interesante ver qué especies se comercializan en la dark web, es al menos igual de interesante ver qué especies faltan realmente en estos “mercados oscuros”. “Muy pocas de las especies tradicionalmente amenazadas por su comercio y que se ofrecen con frecuencia en la web abierta se comercializan en la dark web”, afirma Cassey. “Esto demuestra que la aplicación y regulación del comercio de estas especies sigue siendo actualmente tan deficiente que la gente no ve razón alguna para trasladar el comercio a partes ocultas de Internet”.

Uno de los objetivos del estudio era también averiguar hasta qué punto el comercio en la dark web contribuye actualmente a la crisis de biodiversidad que se está desarrollando ante nuestros ojos. A este respecto, los investigadores tienen buenas noticias. Con una media de unos 600 anuncios al año, los mercados de especies silvestres en la dark web (a diferencia de los de la web abierta) aún no suponen una amenaza inmediata y enorme. Aun así, es bueno vigilar de cerca la situación, sostienen los investigadores. 

Por el momento, no se puede descartar que el comercio en la red oscura aumente, por ejemplo, debido a una aplicación más eficaz de la ley en la red abierta. “Si el comercio de especies silvestres se regula más y es objeto de críticas y los comerciantes son castigados y perseguidos con mayor dureza, es muy probable que el comercio se realice cada vez más en la oculta. Aunque la dark web no sea una gran fuente de comercio de especies silvestres en este momento, eso no significa que no pueda llegar a serlo en el futuro”, advierte Cassey.

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