Los científicos llegan a esa conclusión en un nuevo estudio. Sus hallazgos son sorprendentes porque durante mucho tiempo se ha dado por sentado que, en lo que se refiere al desarrollo del lenguaje, las niñas tienden a ir ligeramente por delante de los niños.
Los bebés emiten gritos cortos que pueden considerarse precursores de las palabras. A medida que crecen, estos llantos van dando paso a las primeras palabras, que más tarde se convierten en frases. Que algunos bebés “hablan” más que otros es algo sabido. Pero ahora, en la revista iScience, unos investigadores afirman haber hallado pruebas de que también existen diferencias apreciables entre el número de llantos que emiten los niños y las niñas. De hecho, en general, los niños parecen “hablar” más que las niñas durante su primer año de vida.
El estudio
Los investigadores basan esta conclusión en un estudio de, 5899 bebés. Utilizando un diminuto dispositivo de grabación, se registraron los sonidos emitidos por estos bebés (y sus cuidadores) en los dos primeros años de vida de los niños. El resultado fueron más de 450 000 horas de grabaciones sonoras. “Que sepamos, nunca antes se había analizado tanto material para un estudio sobre el desarrollo del lenguaje”, afirma el investigador Kimbrough Oller.
Un recuento del número de llantos que emitían los bebés muestra que los niños emitían alrededor de un 10 % más de sonidos que las niñas en su primer año de vida. En el segundo año, los papeles se invirtieron y las niñas “hablaron” alrededor de un 7 % más que los niños.
Curiosamente, estos resultados se observaron a pesar de que el número de palabras pronunciadas por los adultos que cuidaban de estos bebés en ambos años de vida era mayor hacia y cerca de las niñas que hacia y cerca de los niños.
Es algo sorprendente
Que los niños sean más habladores que las niñas, al menos en su primer año de vida es sorprendente. “En general, se supone que las mujeres tienen una ligera, pero notable ventaja sobre los hombres en lo que se refiere al lenguaje”, afirma Oller. Así que, teniendo esto en cuenta, parecía más plausible que los investigadores descubrieran que las niñas “hablan” más que los niños en su primer año de vida. Pero, de hecho, no es así. “En el primer año, los hombres parecen producir más vocalizaciones de tipo lingüístico que las mujeres”, afirma Oller.
Posible explicación
La gran pregunta ahora, por supuesto, es por qué los niños vocalizan más en ese primer año de vida. Los investigadores sugieren que es posible que se deba simplemente a que los niños son más activos. Pero los datos no parecen corroborarlo. Porque en el segundo año de vida, los niños siguen siendo más activos que las niñas, pero son las niñas las que “hablan” más que los niños.
Entonces, ¿cómo puede explicarse el comportamiento hablador de los niños en su primer año de vida? Tal vez, sugiere Oller, basándose en la teoría de que los bebés emiten sonidos desde muy pequeños para expresar su bienestar y, de paso, aumentar sus posibilidades de supervivencia. De hecho, con esa teoría en mente, no es nada sorprendente que los niños hagan más ruidos que las niñas en su primer año de vida.
“Creemos que eso se explica por el hecho de que los niños tienen una tasa de mortalidad más alta en su primer año de vida que las niñas. Y como tantos niños mueren en su primer año de vida, es posible que experimenten una presión de selección especialmente alta para producir estas señales vocales de aptitud”.
Sin embargo, los investigadores afirman que se necesita investigar más sobre los llantos de los bebés para entender mejor por qué los niños “hablan” más que las niñas en su primer año de vida. Por ejemplo, les gustaría averiguar con más detalle cómo responden los padres y cuidadores a estos llantos. “Esperamos que a los cuidadores les interesen y les encanten los sonidos parecidos al habla”, afirma Oller. “Y eso podría ser un indicio de que las señales de aptitud del bebé evocan sentimientos de afecto y aumentan la disposición a invertir en el bienestar de los bebés que son especialmente muy habladores”.