Es bien sabido que es mejor consumir algunas vitaminas en combinación con la fruta en la que se encuentran, ya que así el organismo absorbe mejor las sustancias saludables. Sin embargo, que también se pueda añadir azúcar para obtener mayores beneficios para la salud es bastante sorprendente.
Según una nueva investigación, esto es cierto en el caso de los polifenoles. Los investigadores afirman que si se combinan estas sustancias saludables con moléculas de azúcar, surgen fármacos que pueden salvar vidas.
Son insolubles
Los polifenoles se encuentran en numerosos productos vegetales. Piense en el brécol, las uvas y las cebollas, pero también en el té, el vino tinto y la cúrcuma. Los polifenoles ayudan a prevenir el daño celular en el organismo y pueden ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer o las cardiopatías. El problema es que muchos polifenoles no se disuelven en agua, lo que dificulta aprovechar todo su potencial saludable.
Investigadores de la Universidad Estatal de Utah han encontrado ahora una solución. Abogan por la adición artificial de O-glicósidos polifenólicos, que hacen que los polifenoles sean estables y solubles mediante fermentación microbiana. Es decir, los intestinos pueden procesar las sustancias, permitiéndoles realizar su beneficiosa labor.
Unir moléculas de azúcar
“Los polifenoles tienen muchos efectos diferentes en el organismo y pueden utilizarse para desarrollar posibles fármacos y suplementos nutricionales”, afirma el investigador principal, Jixun Zhan, profesor de ingeniería biológica. “También tienen propiedades saludables naturales y pueden proteger los tejidos de nuestro cuerpo de los daños causados por sustancias insalubres. Por desgracia, su escasa solubilidad en agua y su baja biodisponibilidad limitan sus beneficios para la salud”. La biodisponibilidad se refiere al grado en que una sustancia es absorbida por el organismo, aportando beneficios para la salud. Afortunadamente, los polifenoles tienen solución. “Uniéndoles moléculas de azúcar, podemos disolverlos mejor en agua y mantenerlos más estables”.
Este proceso se denomina glicosilación. Se trata de un proceso enzimático en el que se unen grupos de azúcar a una proteína. Los investigadores están utilizando nuevos métodos, como la fermentación bacteriana, para modificar estas estructuras de azúcar y los polifenoles. Estudiando las enzimas y los procesos de esta biosíntesis de azúcares, ahora es posible fabricar glico-medicamentos más eficaces. En su artículo, Zhan describe los distintos glucósidos fenólicos que se encuentran en la naturaleza y los métodos utilizados para producirlos.
“Averiguando los mecanismos que subyacen a la producción de estos compuestos en bacterias y desarrollando después métodos para manipular la biosíntesis de azúcares, podemos crear fármacos médicos útiles y mejorar así la salud”, explica Zhan.
Ampliación de la producción
Ya se han desarrollado varios métodos para producir glucósidos polifenólicos en el laboratorio, pero en la mayoría de los casos sigue siendo a pequeña escala. Por ello, la investigación futura debe centrarse en mejorar la eficacia del proceso de producción. Deberían mejorarse las condiciones de fermentación y buscarse mejores formas de transportar los nutrientes saludables a través del organismo.
“Los glucósidos polifenólicos son sustancias valiosas con diversos beneficios para la salud. El uso de microbios para producir estas sustancias de forma controlada y rentable es prometedor para la producción a gran escala a largo plazo”, concluye.
Así que no funciona lo de echar una cucharada de azúcar con el brócoli, pero es más o menos la misma idea.
¿Qué son exactamente los polifenoles?
Son compuestos químicos de moléculas formadas por más de un grupo fenólico. Se encuentran principalmente en las plantas y pueden dividirse en taninos, que conocemos ampliamente por el color rojo, y fenilpropanoides, como los flavonoides, que se encuentran en las manzanas, las bayas y el brócoli, por ejemplo.
Los polifenoles son antiinflamatorios e incluso se dice que protegen contra el cáncer. Son antioxidantes que actúan contra los llamados radicales libres que ingerimos de alimentos poco saludables. También se dice que los polifenoles reducen la tensión arterial, aunque el Centro de Nutrición afirma que aún no hay pruebas suficientes de la mayoría de las afirmaciones sobre la salud.