Los científicos del campo de la psicología llevan mucho tiempo estudiando qué puede hacer reír a la gente. Las explicaciones varían: los desencadenantes de la risa incluyen la transgresión (hacer reír a lo prohibido), el paso de la arrogancia y la superioridad (ridiculizar) y la incongruencia (dos significados incompatibles en la misma situación).
El psicólogo Carlo Valerio Bellieni, de la Universidad de Siena (Italia), decidió revisar toda la literatura disponible sobre la risa publicada en inglés durante la última década para ver si se podían extraer nuevas ideas. Y de hecho lo hizo.
"Después de estudiar más de un centenar de artículos académicos, llegué a una nueva explicación de la risa: la risa es una herramienta que la naturaleza ha proporcionado para ayudarnos a sobrevivir", escribe Bellieni sobre su investigación en The Conversation.
La risa acaba con el miedo y la preocupación
En su estudio publicado en la revista Science Direct, el psicólogo escribe que la risa puede haber evolucionado y se ha desarrollado durante la evolución porque no solo ayudaba a reducir el estrés, sino que también aumentaba las posibilidades de supervivencia. "También puede explicar por qué nos atraen las personas que nos hacen reír", señala Bellieni en The Conversation.
La risa, dice, puede dividirse en tres fases. En primer lugar, debe haber situaciones especiales para evocar sentimientos de incongruencia, confusión o pánico. En segundo lugar, es necesario procesar y superar el miedo o el estrés que la situación incongruente ha provocado. Por último, está la liberación de la risa que "actúa como una sirena", alertando de que está a salvo. Esto supone un alivio.
"La risa puede ser una señal que los humanos han utilizado durante milenios para hacer saber a los demás que no es necesario reaccionar luchando o huyendo, que la amenaza ha pasado", escribe Bellieni.
Este mecanismo, dice, puede explicar por qué la risa es "contagiosa" en un grupo de personas: nos une, nos da cohesión y señala el fin del miedo o la aprensión.
Con la risa podemos aprender y enamorarnos
Las raíces prehistóricas de la risa humana también se reflejan en la forma de humor actual. Según el profesor italiano, los chistes modernos suelen empezar con algo familiar de la vida, que se convierte en algo extraño y confuso, de modo que el oyente acaba dándose cuenta de que las cosas no son tan serias como parecen.
El humor negro, por ejemplo, parece echar por tierra esta explicación. Pero Bellieni explica que es al revés. El mecanismo tranquilizador de un chiste, dice, podría ser la razón por la que el humor está tan presente, por ejemplo, en un entorno hospitalario.
"El humor puede mejorar la presión arterial y las defensas inmunitarias y ayudar a superar la ansiedad y la depresión. La investigación ha demostrado que el humor también es importante en la enseñanza, ya que ayuda a enfatizar conceptos e ideas", señala el profesor, y continúa: "El humor relacionado con la enseñanza ayuda a mantener la atención y crea un ambiente de aprendizaje más relajado y eficaz". Aumenta la actividad y la motivación de los estudiantes.
Bellieni sostiene en el estudio que la risa también es importante a la hora de elegir pareja. "Si la risa de otra persona provoca la nuestra, esa persona nos indica que podemos relajarnos, que estamos seguros, y eso genera confianza", explica la psicóloga.