Confirma que estos juguetones e inteligentes animales marinos se automedican.
Hace trece años, la investigadora Angela Ziltener fue testigo de una escena extraordinaria. Frente a la costa de Egipto, vio a los delfines frotándose contra los corales cuidadosamente seleccionados. "No había visto este comportamiento antes", dice. "Estaba claro que los delfines sabían exactamente a qué corales dirigirse". En un nuevo estudio, se propuso encontrar respuestas. ¿Qué hay detrás de este sorprendente comportamiento? "Debe haber una explicación", dice Ziltener.
El estudio
La mayoría de las investigaciones sobre los delfines se realizan desde la superficie del agua. Pero como Ziltener es buceadora, pudo estudiar a los delfines de cerca. Se necesitó algún tiempo para ganarse la confianza del grupo de delfines, también llamados manadas. Pero una vez que se ganó esa confianza, los trató con visitas regulares. Ziltener y sus colegas descubrieron que los delfines mulares del Indo-Pacífico se frotaban repetidamente contra ciertos tipos de coral, lo que hacía que los corales segregaran un tipo de moco. Para entender qué propiedades contenía este limo, los investigadores recogieron varias muestras.
Los corales
Los investigadores examinaron tres tipos diferentes de coral, a saber, las especies de coral blando Rumphella aggregata y Sarcophyton y la esponja Ircinia. Utilizando técnicas avanzadas, descubrieron notablemente 17 metabolitos activos ("productos metabólicos") con propiedades antibacterianas, antioxidantes, hormonales y tóxicas.
Efecto medicinal
Con el descubrimiento de estos compuestos bioactivos, el equipo sospecha que la baba que segregan los corales y las esponjas tiene propiedades medicinales. Y los delfines se han dado cuenta de ello. "Al frotarse repetidamente contra estos corales, los metabolitos activos entran en contacto con la piel de los delfines", explica la investigadora Gertrud Morlock. "Y eso es potencialmente un tratamiento eficaz contra las infecciones microbianas".
Una madre delfín enseña a su cría a frotarse contra el coral medicinal. Imagen: Angela Ziltener
Significa que los delfines pueden hacer de dermatólogos. Porque al frotarse contra el coral cuidadosamente seleccionado, tratan sus propias infecciones de la piel. Es un descubrimiento interesante. Porque confirma que estos juguetones e inteligentes animales marinos aparentemente practican la automedicación. Han encontrado una forma eficaz de curar las enfermedades de la piel por sí mismos.
Importancia
Este descubrimiento demuestra una vez más la importancia de los corales para los ecosistemas marinos, así como para varias poblaciones locales de delfines. "Mucha gente no se da cuenta de que estos arrecifes de coral son a la vez dormitorios y zonas de juego para los delfines", dice Ziltener. "Entre sus siestas, se frotan regularmente contra los corales de curación. Es casi como si se ducharan y se lavaran antes de ir a dormir o de prepararse para el día".
Aunque los investigadores han desvelado con su estudio un misterio que viene de lejos, no lo dan por zanjado todavía. En futuros estudios, el equipo espera averiguar si los delfines eligen otros corales y esponjas para determinadas partes del cuerpo y, en caso afirmativo, cuáles.